Desde que los hombres descubrieron el fuego, se ha venido utilizando fuentes de energía como el agua, la fisión nuclear, el viento o el sol, pero no conocíamos la manera de obtener la energía sobrante de nuestro propio cuerpo para obtener electricidad.
Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad Simon Fraser, Canadá, han descubierto un sistema para aprovechar la energía mecánica que absorben nuestros tendones cuando caminamos. Consiste en una rodillera que convierte esta energía mecánica en energía eléctrica de manera similar a la de un coche hibrido, que recarga sus baterías cuando frena.
Las pruebas que se han realizado demuestran que corriendo se pueden llegar a generar 54 watios, aunque lo normal es generar en torno a 5 watios caminando un metro y medio por segundo. El mecanismo se encuentra todavía en fase experimental.
El único problema que yo le veo a esto cuánto vale la construcción de la rodillera, y si realmente sale rentable la obtención de energía de este modo. Aún así es necesario seguir investigando.
Fuente: elmundo.es
1 comentario:
Esta chulísimo! Lo que pasa es que claro, a saber lo que cuesta la rodillera, o si llega a acabarse del todo la investigación... es una forma más de ser "ecológico", que hay más ecológico que tu propio cuerpo!, igual se consigue lo mismo con los animales... Besitos!
Inma
Publicar un comentario